Villa quietud
¿Qué hay en la desolación que nos permite crear atmósferas de quietud? Objetos solitarios deambulando por un mundo abandonado resignifican su objetivo humano. Naturaleza, viñedos, espacios de recreación y simuladores para turistas se detienen en el tiempo para dejarnos en claro la inutilidad de su existencia. Rezagos humanos aparecen intermitentes y nos recuerdan que aquí hubo experiencias humanas y que a veces las experiencias humanas son simples y orgánicas. Un tour infinito por las reminiscencias del ocio en la Tierra, por la sonoridad de un mundo abandonado, por la suavidad de lo que alguna vez fue diversión y descanso.
Ivo Loyola especula con esta distopía en donde el turismo y todo lo que simboliza, se aparece como un campo sardónico que terminará habitado por insectos y animales salvajes. Video, programación de videojuegos, instalación, desborde de materiales y sueños apocalípticos, son la base de un ejercicio mutante que nos adentra al mundo sombrío de las costumbres extrañas y la realidad materialista.
Un resort para la muerte, con las aves cantando y las albercas relucientes, paseos en Jeep, pelotas inflables, juegos y carnes asadas. Ojalá así se sienta la transición, como un picnic plástico en donde las sillas y las cajas que quedaron en el mundo nunca dejan de moverse. Todavía no tenemos muy claro cómo será el arte del futuro, pero algunas cosas nos dan una pista y con seguridad el trabajo de Ivo arremete contra esta inútil experiencia.
Bienvenidxs a Villa Quietud, encontrarán toallas limpias en el lobby y el buffet se sirve hasta las 12am. No hay devoluciones de vida.
Horacio Warpola


Video Safari es una obra de dos canales no narrativa que retrata con ironía al programa nacional de “Pueblos mágicos“, mostrando los excesos que este conlleva. En las imágenes hay espacios y objetos dispuestos con los que se pueden recolectar pistas espectrales que dan a entender que es lo que sucedió allí.

Objetos perdidos se genera en tiempo real y está inspirado en los mundos virtuales de los videojuegos, en como tienen una vida propia, existiendo en todo momento a pesar de que no los estemos viendo; los objetos y personajes que habitan allí se encuentran destinados a repetir la misma tarea sin fin. Esta pieza intenta explorar una condición cíclica y la dificultad de escapar a reglas y eventos que fueron previamente programados.


Quest imagina un tiempo virtual suspendido: retrata a diversos "NPCs" (Non Playable Characters) atrapados en un ciclo eterno de repetición dentro de diversos escenarios de Villa Quietud, un espacio ficticio que intenta buscar un común denominador del turismo de pueblos mágicos.

